Los comienzos del cine digital
La primera proyección comercial de cine digital tuvo lugar en Mayo de 1999 en Estados Unidos.
Los seis primeros años se caracterizaron por una fase de investigación y desarrollo de la tecnología utilizada para convertir el cine digital en una realidad tecnológica y comercial.
No obstante, después de un lanzamiento fallido de Technicolor, quedó patente que el mercado necesitaba garantías de que esta tecnología no fuese a quedar obsoleta a corto plazo, así como evitar una multiplicidad de formatos y el caos logístico que aquello supondría.
Las principales razones que impulsaron la digitalización de las salas de cine fueron el ahorro de los costes de las copias y la reducción de la piratería.
Los estudios estadounidenses, mostraron su interés por el posible ahorro en los costes de las copias, dado que el mercado de la duplicidad de las copias de 35 mm tiene un coste aproximadamente de 2.000 millones de $ y los estudios representan las tres cuartas partes de dicha cuota (es decir, 1.500 millones de $).Como se presume un ahorro del 75 % al utilizar copias digitales, estaríamos hablando de 1.125 millones de dólares ahorrados al año.
La distribución era el sector que iba a sufrir la mayor transformación y el mayor ahorro. El 6 de Junio del año 2000 la distribuidora Century Fox y la de telecomunicaciones Cisco, realizaron el primer envio de una película a través de una red IP, diseñada con la última tecnología de Cisco en cuanto a capacidad y seguridad. La experiencia permitió proyectar simultaneamente en la feria de Atlanta, en Georgia, en los Angeles y California la película TITAN, que se transmitía desde el otro extremo de Estados Unidos.
La película fué un fracaso financiero a pesar de estar nominada como mejor película de animación.
En cuanto a la piratería, hay que señalar que más de la mitad de las normas se dedicaban a la seguridad relacionada con la creación y distribución del archivo digital.
Para los creadores de DCI, el problema de la piratería constituía el aspecto primordial